En Barcelona, muchos taxistas han planteado la necesidad de poner cámaras de vigilancia en taxis. Aunque de momento parece que no va a salir adelante, es una posibilidad que no habría que descartar en el futuro.
Es un asunto que lleva pendiente muchos años, pero que tiene difícil encaje legal y social. Hay experiencias previas en Málaga, Sabadell, Tarragona o en casos concretos de Madrid.
Los taxistas de Barcelona que lo piden lo hacen ante la inseguridad de las calles, que consideran que requiere un sistema de vigilancia propio. Con ello buscan poder identificar a los agresores en los casos de robo o agresión.
Pero en este debate hay que tener en cuenta el derecho de la intimidad de los clientes. La estable que en un taxi, está permitida la instalación de un sistema de vigilancia, pero con muchas condiciones.
En Barcelona, por ahora no habrá cámaras en los taxis
De momento, Barcelona se queda sin cámaras de vigilancia en taxis. A la Generalitat y al IMET (división del Área Metropolitana de Barcelona dedicada al taxi) no les gusta la idea de cámaras de videovigilancia, por el tema de la intimidad. Los Mossos estarían de acuerdo siempre que se cumpla la regulación y protocolos
La IMET propone otras medidas de seguridad. Como la de actualizar el sistema de llamada al 112 a través de un botón oculto. Según el taxi, esto necesita una revisión con nuevos sistemas más actualizados.
O también piensan en un mecanismo de SOS, con el que el conductor pulsa un botón de seguridad. Dentro del vehículo no pasaría nada, pero la capilla del coche, donde se puede ver la luz de libre y ocupado, cambiaría de color y activaría el letrero de SOS. La policía solo tendría que parar y comprobar la situación.
Cuestión legal sobre el derecho a la intimidad
Respecto al debate legal, en España no está permitido grabar con un móvil, al ser considerada una violación de la intimidad del cliente. Pero sí se puede con un sistema de vigilancia, siempre que el taxi lleve el aviso amarillo de que el cliente está siendo grabado, en un lugar visible. El pasajero estaría aprobando su grabación al entrar en el taxi.
La pegatina identificadora debe cumplir con la normativa y llevar la información pertinente del sistema de vídeo. También el taxista debería llevar los documentos reglamentarios y la normativa actualizada en caso de que el pasajero exija su revisión.
Respecto al registro de las imágenes, al igual que sucede en negocios, solo se podrían revisar durante el suceso denunciado y solo con 20 segundos antes y después. Además, los archivos se mantendrían durante un mes máximo bajo un sistema cifrado y protegido.
Esta normativa la conocemos muy bien en Prointex. Nosotros ya instalamos cámaras de videovigilancia en muchos negocios, locales y domicilios privados, para asegurar lo que más te importa en esta vida, la seguridad de los tuyos.